Un total de 18 jóvenes con edades comprendidas entre 16 y 30 años empezaron el pasado día 10 de abril un curso formativo en energías renovables para instalaciones solares fotovoltaicas promovido por Cáritas Diocesana de Zamora, con el apoyo de la Fundación Iberdrola, en el marco de su Programa Social de 2023. 

El curso, que se desarrollará hasta finales del próximo mes de junio, con 200 horas de formación, “especialmente práctica y con profesores experimentados”, tendrá una segunda edición en septiembre, con otros tantos alumnos.

“El presupuesto es de unos 80.000 euros para las dos ediciones del curso, contando la que se hará en septiembre. La Fundación Iberdrola aporta 40.000 euros y el resto, con financiación de fondos propios y otra parte, con alguna subvención de alguna entidad pública”, precisó el director-delegado de Cáritas Diocesana de Zamora, Antonio Jesús Martín.

“Cáritas ya ha tenido otras colaboraciones con Iberdrola, aunque es la primera vez en este ámbito, presentándonos a una convocatoria de concurrencia competitiva. Hay que destacar la colaboración entre administraciones públicas, la empresa privada y Cáritas. Todo lo que sea trabajar juntos nos beneficia a todos como sociedad”, subrayó.

Martín de Lera hizo estas declaraciones en la sede central de Cáritas Diocesana de Zamora, junto con el presidente de la Fundación Iberdrola España, Fernando García, y el director de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana. El acto también contó con la presencia del delegado de Iberdrola en Castilla y León, Miguel Calvo.

“Iberdrola seleccionó en 2015 los objetivos de desarrollo sostenible como los elementos que iban a dar cuerpo al dividendo social, con vistas a intentar mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos”, indicó el presidente de la Fundación Iberdrola, Fernando García. “Enseñanza y formación, elemento básico para la igualdad; defensa del medio ambiente; arte y cultura, como elemento psicológico individual y social y contractual económica, y la acción social, con la infancia, la juventud y la mujer en citaciones críticas o vulnerables. En esta acción social se enmarca la colaboración Cáritas”, enumeró.

Después de la presentación, los promotores del proyecto acudieron a las instalaciones de Proyecto Hombre en las que se desarrollan los cursos gratuitos de energías renovables para instalaciones solares fotovoltaicas.

Por su parte, el director de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana, recalcó que “dar oportunidades a los jóvenes” constituye “una gran parte del futuro del desarrollo” de España. “Está habiendo y va a haber mucha inversión por parte de todas las compañías. En Iberdrola, demandamos jóvenes bien formados y la experiencia en proyectos parecidos en otras zonas tiene un nivel de éxito muy importante”, aseguró.

“Contribuimos a reducir un problema social, que es tener un colectivo de jóvenes en la calle, sin nada que hacer y sin un futuro a corto plazo. Hemos conseguido una formación práctica, con mucho tiempo al aire libre, y los jóvenes se forman más a gusto en ese entorno. El nivel de compromiso que estamos viendo es muy interesante y vaticino que vamos a tener mucho éxito”, auguró.

De izquierda a derecha: El director de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana. el delegado-director de Cáritas, Antonio Jesús Martín y el presidente de la Fundación iberdrola España, Fernando García

STEM

Por lo que se refiere al hecho de que, de las 18 personas que hacen el primer curso no figure ninguna chica, Ramón Castresana hizo hincapié en la “necesidad” de “educar a la propia sociedad” para conseguir que muchas más mujeres estudien Formación Profesional en el mundo STEM (Science, Technology Engineering and Maths, Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).

Estamos intentando potenciar programas empeñado con niñas en Primaria y Secundaria para explicarles que el mundo STEM no es solo de hombres. Tenemos muchos proyectos intentando concienciar sobre un nicho de mercado que precisa mucha mano de obra y desmitificar que sea solo para hombres”, insistió. “Prácticamente es todo tecnología y puede manejarla indistintamente un hombre o una mujer”, concluyó.